En función de la habitación en que queramos instalar nuestro nuevo suelo, elegiremos unos tonos u otros. Los colores claros dan sensación de espacio ya que son más luminosos, mientras que los oscuros otorgan calidez a la estancia.
El uso que le vayas a dar al suelo será determinante a la hora de elegir el material. No es lo mismo un piso donde vive una pareja que está todo el día fuera, que otro donde vive una familia numerosa con mascotas. Los materiales más duros son el gres y la piedra y los más frágiles los parquets.
Si nuestro baño no es demasiado grande, poner alicatado con racholas o azulejos de color claro y manteniendo el mismo modelo y color de rachola ayudará a ganar sensación de amplitud. Si el baño es alargado, usar un color más oscuro en la pared de fondo ayuda a mitigar la sensación de "tubo".