El presupuesto de tu reforma incluirá aquello que tú pidas y, además, aquello que sea necesario para su ejecución. Por ejemplo: ampliar una ventana puede implicar tener que añadir una viga a la pared. Esto significa más coste. Luego ten en cuenta tus prioridades para saber a qué renunciar si fuere necesario.
Ya que se van a acometer obras importantes puede ser el momento para instalar una tarima flotante, un suelo calefactado, climatizacíon por conductos en lugar de splits individuales o para poner ventanas con doble cristal y cámara de aire. Además de una mejora y un ahorro en tu gasto de calefacción y aire acondicionado conseguirás también mejor aislamiento acústico.
Nos nos referimos a que te pongas lo guantes y te dispongas a tirar un tabique sino a que participes con aspectos como realizar un esbozo de tu reforma, ya se encargará el aparejador de darle forma pero tus ideas son fundamentales. También es interesante que vayas viendo las obras según se van haciendo para asegurarte de que te gusta como va quedando antes del resultado final.